jueves, 27 de septiembre de 2007

Detras de la fachada

Enrique Arredondo en Detrás de la fachada hacienda sus rutinas de siempre.

9 comentarios:

analista dijo...

ñoo Enrisco un cubo lleno para el vaso de la nostalgia!

Anónimo dijo...

A QUE NO SE LES PARECE A ALGUIEN CON EL MONITO DEPORTIVO DE CUBA?

Enrisco dijo...

Yo no soy precisamente un nostalgico por aquello de que la nostalgia nubla la vista hace que uno no sepa distinguir entre Led Zeppelin y Foreigner o entre la comedia silente y La pelotica traviesa. Pero Arredondo es otra cosa, es el eslabon entre aquello de que se reian nuestros abuelos y lo que luego nosotros ibamos a reirnos. Fue, por cierto, el unico que en nuestra epoca se burlo de los munequitos rusos (si ese incomprensible objeto de la nostalgia de buena parte de nuestra generacion) y la leyenda cuenta que fue sancionado por eso. Uno entiende perfectamente por que Trespatines se fue pero agradece que alguien como Arredondo se haya quedado.

Infortunato Liborio del Campo dijo...

Creo que este fue uno de los detrás de la fachada más famosos mejor logrados, porque por ese tiempo él estaba medio suelto y era una morcilla detrás de la otra. Fíjate que Monga nada más que le da el pie forzado y el empieza a improvisar, eso de que eras una mujer y ahora un rastrojo y luego cuando se va y le dice mira ver si te rejuveneces que yo no puedo vivir con viejas y luego va fuera de libreto y le planta un beso a Consuelito, que estaba trabajando con un problema en la cervical. Arredondo si enmorcillaba de lo lindo y no como las morcilas prefabricadas de los humoristas de los últimos tiempos en Cuba. Eso exigía que todo el mundo estuviera en la viva en el set para seguirle la corriente.

Lo de los muñequitos rusos yo creo que es una leyenda urbana, porque yo no he conocido a nadie que haya visto el programa donde lo dijo, se parece a la leyenda de Armando Calderón cuando dijo eso de "esto se ha puesto aquí de pinga queridos amiguitos". Pero de todas formas, sea cierta o no, es muy creible, que es lo que interesa.

Enrisco dijo...

En el caso de la morcilla de los munequitos rusos yo estoy convencido de haberlo visto y hasta podria dar detalles de la situacion en que solto la frase. Para mi en ese momento fue lo mas natural del mundo pero va y me convencen de que todo es una ilusion mia y yo todo lo que tengo como evidencia es una memoria que me ha fallado en circunstancias parecidas. Con lo de Armando Calderon me pasa lo mismo que a ti. ni recuerdo haberlo oido ni conozco a nadie que afirme haberlo oido personalmente.

analista dijo...

Debe ser un problema de la edad, Libo + Enrisco, pues yo recuerdo como hoy el día, en que sentado en la sala de mi casa, viendo la Comedia Silente que no me la perdía nunca, soltó Calderón su frase célebre. Desde el principio de la sincronización parecía que se había dado dos tragos de más. Pocos minutos despu´s me llamó un amiguito mío para preguntarme si yo también había oído eso. Si la memoria de me falla (son 40 años por lo menos) fue en un episodio de Chorro de Plomo y Soplete.

Anónimo dijo...

Perdonen la intromisión en este hilo pero me han hecho recordar varias cosas de mi niñez en Cuba.

Nos fuímos comenzando el año 67 y todavía daban los muñequitos americanos; las viejeras de Betty Boop y otros más de los años 40 y 50. Por eso me resulta muy curiosa la fascinación (se le podrá lamar así) que los de su generación tienen con los muñequitos rusos. Sí recuerdo unas mini-series rusas pero no muñequitos en esos tiempos.

El programa estelar que mejor recuerdo, por su popularidad, era uno que se desarrollaba en un pueblo ficticio, San Nicolás del Peladero o algo así, y era sobre la eterna pugna política (cómica) entre liberales y conservadores. También pasaban de lunes a viernes, como entre 6 y 7 de la tarde, adaptaciones de Robin Hood, La Isla del Tesoro, El Corsario Negro, etc.

Ese Armando Calderón, el de la célebre interjección, era quien doblaba unas comedias del cine mudo, y que hacía todos los personajes y la banda sonora. Este programa lo transmitían sábado o domingo por la mañana ¿no?

Por último y acaso mi disco duro, más antiguo que el de ustedes y seguramente con muchísimos sectores dañados, me falle pero viene a la memoria un programa infantil animado por una artista que npi de su nombre acompañada de un títere (de los que parecen una media con una cabecita, no era marioneta). Ella se colocaba delante de un parapeto a la altura de su torso y el titiritero detrás, el muñeco asomándose por encima del murito. Nunca fallaba que en algún momento del show el títere, representando un niñito o un guajirito, se échase a llorar, estremeciéndose por los sollozos, sobre el hombro de ella. Era entonces, que en vivo y a todo color (blanco, negro e in-between) disfrutábamos de la rica sobada de teta que propinaba la mano enfundada por el muñeco.

Anónimo dijo...

Yo tengo un vago recuerdo del programa en que Arredondo amenazo al niñito con ponerle los muñequitos rusos, pero recuerdo perfectamente la frase. Lo de Calderon, no recuerdo haberlo visto el dia de la celebre frase, solo por los comentarios de otros.
Sobre lo del titere, habia dos programas, Amigo y sus amiguitos, el otro era Tia Tata cuenta cuentos, pero no recuerdo exactamente los detalles. Por cierto, esta frase de "Tia Tata cuenta cuentos" se hizo muy celebre, cuando yo era ya un adolescente, para describir los discursos del coma-cagante-en-jefe.

Anónimo dijo...

yo si recuerdo lode "pinga queridos amigiutops , pues no perdia ni un solo program y lo de Arredondo cn el nieto tambien ha sido verdad y Cepero Brito tambien estuvo castigado por cosas k decia en las camaras...un saludo
Mayeb