lunes, 5 de enero de 2009

La velocidad

Si en algo superan ampliamente las dictaduras a las democracias es en su carácter ejecutivo. Da igual que lo que se ejecuten sean decretos o prisioneros, los dictadores no tienen que detenerse en tediosos debates parlamentarios. Eso ocurre con cualquier dictadura excepto la cubana. El Dictador Relevista se ha demorado casi tres meses después del paso de los ciclones para autorizar la construcción privada de viviendas. Cuando uno ya creía en que la medida no les había pasado por la cabeza -o de hacerlo la habían espantado ante el miedo de lo que la gente podría hacer luego de sentirse libres (aunque sea de construir su propia casa )- finalmente el Segundísimo en Jefe se aparece con el edicto. “Nunca es tarde si la dicha es buena” dirán muchos. “¿Por qué todo tiene que ser tan lento?” pueden preguntarse todos los demás. Pero no todo es lento: para detener, juzgar, confirmar la sentencia y fusilar a un general sólo hizo falta un mes. No es precisamente ejecutividad lo que les falta.

3 comentarios:

Armando Tejuca dijo...

dejame aclarate algo para que te asombres aun mas, lo que ha dicho el segundisimo en jefe es como decir: "dejemos que los cubanos se bañen de una vez" y al otro dia la prensa muestre esto como una nueva apertura. Desde hace mucho time se nos permitio construir la casa, de hecho yo contrui una, lo que no habia era de donde sacar los materiales, en la actualidad venden todo tipo de materiales (un indicador de lo desmesurado del sueño cubano es el saco de cemento a 6 CUC = 9 USD). Por lo que aun es una meta inalcanzable para un doctor o un maestro tirar su plaquita. Es lo mas loco que he escuchado jamas. No es lentitud en la ejecutoria, es burla en la digestion. Se estan jamando a to el mundo macho. Ya ellos ganaron.

Anónimo dijo...

cada cubano un urbanizador

Anónimo dijo...

Que lastima que no sean tan veloces para reparar y construir las casas. En eso son lentos con cajones...