viernes, 26 de agosto de 2011

El concierto (de la discordia) del año

Isbel Alba en Cubaencuentro saca el artículo 36,522 que aparece sobre el tema del concierto de Pablo Milanés en Miami. Por una vez sin embargo no discute el derecho del cantautor a presentarse en Miami sino la curiosa oportunidad de las declaraciones. Allí concluye:

¿Cómo explicar que a estas alturas de la historia algunos intelectuales aún se aferren a un vetusto sistema que no se justifica desde ninguna posición ni tendencia política? Curiosamente en los últimos meses hemos visto aparecer por Miami a otros como Fito Paéz. Tal parece que el contacto con nuestro exilio “los ilumina”, pues en vísperas de sus respectivos conciertos tampoco han dudado en condenar el estancamiento del socialismo cubano.
Solo me gustaría que en lo sucesivo nuestro “Querido Pablo” fuese un poco más coherente. Quizá pueda hacer esas mismas declaraciones en una conferencia de prensa internacional cuando regrese a Cuba, y exigir que se divulguen sus palabras íntegramente en todos los medios de la Isla. Eso le evitará en el porvenir que otras chapucerías queden expuestas bajo la penetrante luz de los reflectores y espacios noticiosos. Porque cuando se es una figura pública el único escudo que nos protege de la pesada acusación de oportunista es la honestidad.
La única objeción que le haría es la de por qué exigirle consecuencia a alguien convertido en voz de la Revolución justo después de su estancia en la UMAP. Eso sería como pedirle a Stevie Wonder que tuviera una visión más clara de la realidad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Por qué han declarado a Pablo como "voz de la Revolución"??? ¿No fueron voces de la Revolución desde Ania Linares (cantando "... y que viva Fidel..") hasta Omara Portuondo, Osvaldo Rodríguez, etc, etc???
¿Por qué Isel Alba no escribió en su momento algo sobre el cambio, mutación, progreso, iluminación, cambio o como quiera llamarlo, de personajes como Alcibiades Hidalgo, Orestes Lorenzo, Azpillaga, Rafael del Pino, etc? ¿Es que Pablo Milanés es el único que no puede cambiar su punto de vista u opiniones? Vaya, le sale de los cojones, como le salió a Isel Alba escribir su mamotreto. Cómo si todos fuéramos químicamente puros en cuanto a política e ideología. No jodan, ahora todo el mundo estaba claro desde el primero de enero del 59. Vayan a que los zurzan!!!